Un lienzo que refleja la fe de su época

Un lienzo que refleja la fe de su época

Una pintura al óleo, como La Virgen de La Asunción, nos dice mucho de nuestros antepasados, del tiempo y su comunidad; enriquece el lugar de culto y se ve el empeño y confianza en trasmitir la fe a través de los siglos.

Es así como la ve Sofía Lobo, en-cargada del equipo de Dalmática en Panamá, una empresa portuguesa que ha sido elegida para la restauración de esta pintura que será parte del Retablo Mayor de la Catedral Metropolitana.

Era la manera de los fieles de expresar su creencia y es la fuerza de la esperanza que hoy anima a otros a mantener la historia vivida por aquellos que quisieron decir al mundo que creían en Dios y en Santa María, señaló.

El cuadro que es restaurado, no representa solo la técnica de un pintor o el arte de un siglo, sino que refleja la vida de cada comunidad, de cada parroquia, enfatizó Lobo.

El lienzo ayer, hoy y mañana

La Virgen de la Asunción del Retablo Mayor de la Catedral es un óleo sobre lienzo de lino, de 198.5 cm de ancho por 298.5 cm, es decir, tres metros de alto. 

Se muestra rodeada de ángeles; probablemente se pintó en el si-glo XVIII o inicios del XIX, infor-mó Sofía Lobo.

En el cuadro puede observarse los ojos de la Virgen: uno es ver-de, otro es chocolate. Estos no han sido repintados; su pintor los colocó así a propósito, sin embargo, no tiene fecha ni firma. 

A partir de abril, los restauradores iniciaron los trabajos de policromía (el arte de pintar o decorar con varios colores) en la pintura de la  Virgen de la Asunción. 

Antes evaluaron el estado de la obra por medio de una luz ultravioleta rasante para determinar el estado de la superficie y a qué alcance llegan los daños, tomando en cuenta que las últimas intervenciones han sido dañinas para la pintura, a la que se le hizo un reinstalado a cera que causó muchos problemas de estabilidad en la superficie. 

En ella se pueden apreciar repintes en varias zonas y la diferencia de colores entre el original y dichos repintes, explicó. 

Para ver culminado el trabajo en la pieza de la Virgen de La Asunción hace falta varios meses, la labor apenas se ha iniciado y poco a poco se están empezando a ver los daños y las técnicas de restauración más convenientes, no obstante, toda la intervención tiene que ser hecha en superficie y toma más tiempo, según informó Lobo. 

Lamentó que la huelga de trabajadores del SUNTRACS representó problemas, pues no se podía acceder a la Catedral, por lo que la pieza fue trasladada a la Iglesia San Felipe de Neri donde actualmente están haciendo los trabajos de restauración.

La empresa restauradora

La compañía Dalmática está dedicada, desde hace diez años,  a la conservación y restauración de arte sacro. Su misión  es la defensa del patrimonio y luchar por su protección y mantenimiento a lo largo de los tiempos. En el año 014, trabajando en el altar de San Pancracio en templo Nuestra Se-ñora de la Merced, se le abrió la puerta para esta nueva misión.

El equipo que se encuentra en nuestro país cuenta con cinco profesionales en conservación y restauración, mientras que en Portugal cuentan con arqueólogos e historiadores. Su formación académica es de mínimo cinco años estudiando arte complementado con química, física y biología, lo que les permite aplicar  las mejores técnicas para el trabajo, junto con la ética de conservación que les obliga a respetar la obra y la historia a la que pertenece.  

Están ejecutando un trabajo exhaustivo con el objetivo principal de ayudar a conservar nuestra historia, explicó Lobo.

La Asunción, punto de partida

Panamá tiene mucho patrimonio en las iglesias  que se está degradando día a día, por lo que tiene que existir una intervención de conservación preventiva para que no se dañe más con los años, y después se puede crear una forma de ver los que están más dañados e iniciar con tratamientos puntuales de conservación, señaló la fuente.

Agregó que, poco a poco, se ha de determinar lo que puede esperar y lo que es más urgente. Esto debe ser hecho con tiempo,calma y bajo un método.

“Con La Asunción, vemos una pieza que llegó a un estado extremo, este es un buen punto de partida para rescatar el resto del patrimonio que existe en el Casco Antiguo, aunque hay mu-chas piezas que ya fueron intervenidas, pero requieren mantenimiento para que los trabajos realizados no se pierdan¨,  destacó la encargada del equipo de Dalmática en Panamá.

“Cada tiempo tiene su propio marco histórico y sus características; tal vez hoy estemos viviendo en la era digital donde no se esté plasmando nuestra fe en lienzo, pinturas grandiosas o esculturas como lo hacían en siglos pasados, pero ahora con-tamos con profesionales, nuevas técnicas y la voluntad de las personas de esta época de conservar lo que  nuestros antepasado nos han dejado para nuestros descendientes. Es el tiempo de mantener”, manifestó.

Está convencida de que los peregrinos nacionales e internacionales que visiten Panamá durante la Jornada Mundial de la Juventud en 2019, deberían visitar la Catedral, el Casco Antiguo, para que no solo aprecien, sino que también entiendan y valoricen la historia, la dedicación de los antepasados y puedan disfrutar del patrimonio en su esplendor total.