“El error de asumir”

“El error de asumir”

Amigo lector, hace unos días meditaba el por qué en nuestro diario vivir, asumimos actitudes referentes a las demás personas, y la mayoría de las veces equivocadamente; lo que trae como consecuencia que veamos conflictos y problemas donde no los hay. Y qué significa la palabra asumir: tomar para sí algo. ¿Cuándo lo hacemos? Todos los días y a veces ni cuenta nos damos.
No le ha pasado que llega a su trabajo y asume que un compañero le ha mirado mal. ¿Qué hace usted? Tal vez decide no dirigirle la palabra y comportarse groseramente porque está tomando para sí lo que no es. Pero puede ser que su compañero haya tenido algún problema en casa y no está tan sonriente como de costumbre. Puede pasar. No asuma, no se cree ideas que no son. Viva feliz.
O si va por la calle y su amigo le pasa enfrente y no le saluda. Usted asume que le ignoró. No se ha puesto a pensar que esta persona sencillamente iba tan distraída que no le vio. Puede pasar. No asuma, no se cree ideas que no son. Viva feliz.
Tal vez fue a un almacén a comprar un regalo y siente que la vendedora no le atendió bien y asume que usted le cayó mal. Pero resulta que esa vendedora es algo seria, es su forma de ser; quién sabe si no durmió bien y hace hasta lo imposible para mantenerse despierta. Puede pasar. No asuma, no se cree ideas que no son. Viva feliz.
En una ocasión alguien me dijo que si uno quiere ser feliz debe dejar de asumir cosas en el hermano, pues la mayoría de las veces nos equivocamos y generamos conflictos donde no los hay.
En más de una ocasión me he equivocado asumiendo cosas que no son. Aprendamos a comprender a nuestros hermanos porque hay días que son mejores que otros.